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El próximo 6 de mayo, Camilla Parker Bowles se convertirá en la reina consorte de Reino Unido tras la coronación oficial del rey Carlos III. A pesar de las críticas que ha recibido en los últimos años, Parker no ha dejado que eso la detenga en su camino a obtener uno de los títulos más importantes del mundo.
Su nueva posición le otorgará un poder que muchas organizaciones y personas del común temen y que será objeto de polémica, pues no solo tendrá la libertad que viene con el título de reina, sino que también será la primera vez en 70 años que se celebra una coronación de un consorte en Reino Unido.
A pesar de ser una figura polémica, Camilla Parker ha logrado conseguir lo que quería y ahora será la protagonista de uno de los eventos más relevantes de los últimos años. La coronación no solo la convertirá en una de las mujeres más poderosas del mundo, sino que también le permitirá dejar atrás el pasado y ser reconocida oficialmente como la reina consorte.
Sin embargo, su nuevo estatus no solo la afectará a ella, sino también a toda la familia real británica. Después de la coronación, todos los miembros deberán hacer reverencia ante el rey Carlos III y Camilla Parker, incluyendo a los príncipes de Gales y los duques de Sussex, un poder que seguramente no será bien recibido por los hijos del monarca británico, especialmente por el Príncipe Harry y Meghan Markle.
Aun así, la coronación de Camilla Parker y el rey Carlos III será un récord en la historia de la monarquía británica, pero también plantea preguntas importantes sobre su futuro papel y el impacto que tendrá en la familia real y en el país.